El defecto más generalizado la que se enfrentan los lectores más jóvenes es un excesivo análisis de las palabras o la lectura palabra por palabra.
A veces esta costumbre se acompaña por movimientos de labios y de boca. Algo que hay que corregir a toda costa si se quiere mejorar la velocidad de lectura.
La lectura rápida
Una lectura rápida no solo se consigue con un movimiento adecuado de los ojos, se debe:
· Ampliar el vocabulario y con ello incrementar capacidad de la comprensión de lo que se lee.
· Hacer una lectura inteligente.
La lectura rápida solo es posible cuando estamos muy familiarizados con el lenguaje y su contenido.
Un método sencillo y práctico para mejorar la velocidad de lectura.
-Intenta mejorar tu vocabulario, consulta frecuentemente el diccionario. Haz fichas de las nuevas palabras que aprendes y esfuérzate por utilizarlas.
-No leas más rápido de lo que te permite tu comprensión. La velocidad de la lectura no es un reto en sí mismo. Lo es, sin embargo, la comprensión.
-Practica la lectura durante tres o cuatro semanas intentando mejorar comprensión y rapidez durante 15 minutos cada día.
-Cada semana, cronométrate leyendo un capítulo de uno de tus libros y mide el número de páginas por hora puedes leer.
No hay comentarios:
Publicar un comentario