La vida es un libro abierto a tu lectura

domingo, 21 de octubre de 2012

Cómo hacer que los niños lean


                                                                                                                         Padres 
Todos sabemos que el hábito de la lectura es un gran estímulo a la creatividad, imaginación, inteligencia y a la capacidad verbal y de concentración de los niños, por ello los libros deberían estar presentes en el día a día de los ellos, del mismo modo que sus juguetes, ya que  nos enriquece a todos y nos lleva a bucear en aventuras, historias, y en importantes  informaciones. Por tal motivo hemos decidido ofrecer algunas herramientas que podrán ser de mucha utilidad para padres y docentes en esta ardua tarea como lo es la aventura del saber, del conocer y del descubrir a través de este mundo fantástico que nos ofrecen los libros.
  El libro es una gran ventana a la formación en todos los sentidos, pero el acto de leer es lo que llevará a su hijo a este rincón tan exquisito que es la aventura del saber, del conocer y descubrir. Y si los padres y las madres comparten el momento de lectura de un libro con los hijos estarán estableciendo un lazo especial entre ambas partes. Promover y difundir el hábito de lectura en los niños es una tarea que nunca debe cesar y debe comenzar dese la temprana edad, se debe inculcar a un bebé desde la cuna y tratar, con persistencia y dedicación, que se convierta en un hábito. Es fundamental para los niños que aprendan a buscar conocimientos mediante la lectura desde la infancia.
No es necesario esperar a que un niño lea para que él pueda tener contactos con los libros. Hay libros para todas las edades. Libros sólo con imágenes, para que los padres vayan indicando el nombre de cada imagen y haciendo que el bebé lo repita, hay libros con vocabularios, es decir que además de la imagen lleva también el nombre debajo de la misma, para que el bebé vaya visualizando las letras y las palabras. Y los libros con texto e ilustraciones para los niños que ya saben leer.
Los padres de niños que todavía no saben leer deben leer una y otra vez lo que sus hijos les piden. No deben limitar sus gustos. Que ellos lean lo que les interesan, sea lo que sea.
 Para que funcione hay que estar atentos a las características individuales de cada niño, a sus gustos, preferencias y a su disponibilidad de tiempo; guiar a los hijos con libertad es la mejor forma de mantener los lazos de ellos con los libros.
Como papás tenemos la gran responsabilidad de ser los principales educadores de nuestros hijos además de ser un constante ejemplo para ellos, por eso motivarlos a tomarle gusto a la lectura y acercarlos a los libros es uno de los retos más importantes en su educación y como sabemos que no es tarea fácil aquí les damos algunos consejos para hacer esta tarea más sencilla.

 Que mejor que ver leer a sus padres

El ejemplo es fundamental. Así que si tú eres un buen lector, o intentas serlo, es más probable que tus hijos quieran imitarte explorando sus libros o tirándose en un cómodo sofá o en un tapete para mirar y leer sus cuentos.









• Léeles siempre antes de que se vayan a dormir y hazlo un ritual
Hacer de la lectura una rutina y un agradable momento asegura un buen comienzo en el proyecto de fomentar la lectura en tus hijos. Porque además para ser un buen lector, al igual que sucede con otras actividades, hay que entrenarse pues es una habilidad adquirida que se va perfeccionando. Muchos estudios han concluido que los niños que pasan un tiempo diario leyendo gustosos serán mejores lectores en la escuela.





 Crea una asociación positiva con la lectura.
No impongas la lectura. Háblales de pasar un rato divertido leyendo sus historias y con frecuencia halágalos por algo positivo que hicieron en el día y diles que podrán irse a dormir un poco más tarde y podrán tener unos minutos más para leer sus libros favoritos. Otra idea es decirle a tu hijo que tienes un buen plan y lo llevarás a escoger un libro en la librería o a seleccionar algunos de los libros, de la biblioteca, que más le gusten para leer durante la semana.



• Visiten la biblioteca con frecuencia
Ir a las bibliotecas y traer libros a casa no te cuesta nada y lo que puedes ganar es algo gigantesco en la educación de tus hijos; el amor por la lectura, la curiosidad por revisar y escoger sus materiales predilectos, leer de uno y tantos temas de su interés y estar en un ambiente donde todos comparten ese aprecio por los libros. Llévalo a conocer las bibliotecas cercanas y obtengan su tarjeta de membresía. Hagan visitas frecuentes a la biblioteca pública y aprovechen también tantas actividades para niños que hacen muchas de ellas, como tardes de conta-cuentos, artes, y temporadas culturales



• Pide a tu hijo que te lea
Cuando ya tus hijo conoce algunos de sus libros notarás el interés que tienen ellos en simular que los leen (cuando todavía son niños pequeños que recién empiezan a conocer el alfabeto). Anima a tu hijo a leerte y verás no solo cuanta imaginación le pone al contarte la historia sino también todo el interés y gusto que empieza a tener por reconocer las letras y sus sonidos.

• Lee a tu hijo en voz alta
La lectura en voz alta trae muchas ventajas para la recordación y desde pequeñitos los niños disfrutarán de esta actividad junto con sus padres; entre más temprano mejor. Muchos padres leen a sus bebés desde que están en el vientre materno y procuran que la lectura esté siempre presente en el hogar. También cuando los preescolares empiezan sus primeros pasos hacia la lectura el leer en voz alta les ayuda a relacionar mejor las letras y sus sonidos y te dan una oportunidad perfecta para ayudarles en la entonación y hasta disfrutar de una buena dramatización de las historietas.
 Tenle su propia biblioteca a la mano
“Los libros son un tesoro” eso le digo siempre a mis hijos. Es importante que aprendan a cuidarlos y apreciarlos como una fuente de conocimiento y de sana entretención y que mejor que los tengan en un lugar especialmente para ellos en casa donde puedan hojearlos y leerlos cuando quieran.



• Compartir la curiosidad de los chicos. Dejar que hagan preguntas y expresen su curiosidad en relación a lo que leen. Escucharlos y no juzgarlos, así como contestar todas las preguntas que hagan en los momentos de la lectura.
• Enseñar nuevas palabras. Cada vez que finalicen una lectura, hay que preguntar qué palabras no entendió, explicarle su significado, para, así, incrementar su vocabulario y ayudarlo a identificar letras y palabras.





2 comentarios:

  1. Que sabia es usted maestra Margaret, yo siempre he dicho que tiene muchas virtudes, pasa el tiempo y uno no termina de conocer a las personas. Esas que señalan y establecen el despertar el interés an algo tan bonito como es la lectura. Usted posee grandes atributos que la pondrán en la vida como una triunfadora. No creo que sea casualidad.

    Yo la conozco y sé y estoy seguro que aún le falta mucho camino por recorrer, y que sabrá emplear su talento en pro de la educación. La educación convertida an arte a través de Margarita Isabel Torres López. Reciba un cordial saludo y muchas felicidades.

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  2. OH!! Muchas gracias por tú comentario, tu honestidad de hace ser grande Mario de la Mancha.

    Saludos

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